Para alcanzar este objetivo, el ejecutivo comunitario lanza el plan REPowerEU, que incluye la diversificación del suministro para evitar a aquellos proveedores que puedan contribuir a la inestabilidad en el mercado como Gazprom, la coordinación entre estados miembros para que las reservas de gas estén al 90 por 100 en octubre de cada año, acelerar la adopción de combustibles renovables para sustituir al gas y reducir el impacto de los altos precios de la energía en los consumidores.
Entre enero y febrero la UE ha asegurado el suministro de gas para este invierno y asegura que puede importar 500.000 millones de metros cúbicos anuales más de GNL de proveedores como Qatar, EEUU, Egipto o el este de África.
La diversificación de proveedores podría efectuarse también a través de los gasoductos de Azerbaijan, Argelia o Noruega, que podrían suministrar 10.000 millones de metros cúbicos de gas adicionales al año. Además, el ejecutivo comunitario continuará en conversaciones con los principales compradores mundiales de gas, como Japón, Corea del Sur, China o India para analizar la situación del mercado a medio plazo.
En un paso más, Bruselas analizará las inversiones necesarias para desarrollar infraestructuras que permitan reducir la dependencia del gas y aumentar la participación del hidrógeno y del biometano, mientras reduce el uso de combustibles fósiles. 09/03/2022