En la actualidad, España es el mayor importador de GNL de Europa (34 por 100) y el país con más plantas regasificadoras (seis activas y una hibernada), y con mayor capacidad de almacenamiento. Estas infraestructuras permiten realizar las operaciones de carga, descarga y almacenamiento del GNL procedente de barcos metaneros, que, posteriormente, se introduce en el sistema de gasoductos como gas natural o se transporta como GNL en camiones cisterna.
Sin embargo, el modelo vigente que regula el acceso a las plantas en España presenta, según señala el documento de la CNMC deficiencias; la definición de los servicios, normativa de acceso y los peajes no han evolucionado de acuerdo a las necesidades del mercado. Prueba de ello, es la pérdida de demanda en favor de plantas regasificadoras de países vecinos. Además, existe una alta concentración en determinadas plantas mientras otras registran poca actividad, lo que genera dificultades operativas para los operadores y limita las oportunidades de trading a los comercializadores.
Otra de las situaciones que se observan es que descargar en una planta regasificadora del sur de la península, como la de Sagunto, puede llegar ser un 50 por 100 más caro que hacerlo en la de Barcelona. Así, mientras Sagunto puede no tener ninguna descarga en varios meses, en Barcelona existe dificultad para acomodar todas las peticiones recibidas.
Por todo ello, la CNMC en su consulta pública propone un nuevo modelo de acceso a las plantas, que potencia los productos y servicios de GNL más atractivos para el mercado, y el acceso a este tipo de infraestructuras.
La implementación de este modelo está sujeta, en particular, a las modificaciones normativas necesarias para asignar a la CNMC la competencia relativa al acceso a las instalaciones de GNL prevista en la Directiva Europea de Gas. 01/10/2018