El acuerdo, que fue presentado en la sede del Consejo Económico y Social (CES), persigue el desarrollo de medidas y políticas de Estado que sean capaces de configurar una política industrial sostenida en el tiempo, con el objetivo marcado por la Unión Europea de que España incremente hasta el 20 por 100 el peso de este sector en el conjunto del PIB de cara al año 2020, cuando en la actualidad el peso del mismo no pasa del 16 por 100.
Los intervinientes en el acto coincidieron en destacar la enorme relevancia que el sector industrial tiene en el conjunto de la actividad económica del país, y en que las circunstancias políticas actuales, con un parlamento particularmente plural, deberían aprovecharse para impulsar un gran pacto que deberá tener como gran beneficiario el conjunto de la sociedad española.
Así, el secretario de la Federación de Industria de CC.OO, Agustín Martín, afirmó que España “necesita recuperar la cultura industrial”, y que la propuesta deberá desembocar en la creación de puestos de trabajo de calidad.
Por su parte, el secretario general de UGT-Fica (Federación de Industria, Construcción y Agroalimentaria), Pedro Luis Hojas, señaló la necesidad de que el sector industrial cuente con mayor peso dentro de la economía española: “es evidente que el sector servicios tiene una gran importancia en el tejido económico español pero debemos primar el sector industrial sobre los demás, ya que en la actualidad tiene un peso insuficiente”. Hojas recordó que el sector industrial genera empleos más estables y con más derechos, e instó a los diputados presentes en el acto a hacer de esta “la legislatura de la industria”.
Por su parte, el presidente de la Federación de la Industria Química Española (Feique), Antón Valero, ha resaltado la necesidad de elaborar una política adecuada para el sector industrial, en un contexto en el que el cambio climático y la economía digital están ya provocando profundos cambios en la sociedad.
El documento se encuentra respaldado, por los representantes del sector del papel (Aspapel), del automóvil (Anfac), Cemento (Oficemen), alimentación y bebidas (FIAB), de la industria química (Feique), de productos petrolíferos (AOP) de la siderurgia (Unesid), el metal (Confemetal), el sector de fabricantes de Equipos y Componente para la automoción, (Sernauto), el textil (CIE), el de la moda (Moda España) y el del calzado (FICE).
El documento firmado sitúa como objetivo prioritario el desarrollo de “una política energética estable que permita garantizar el suministro energético a un precio competitivo, que atienda a la necesaria reestructuración de nuestra industria y economía, que prime la investigación, el desarrollo y la innovación en tecnologías sostenibles, que impulse la independencia energética con el desarrollo de energías renovables, la cogeneración y los recursos autóctonos, y que preserve los sistemas de gestión de la demanda”. 29/11/2016