La regidora Gema Igual ha visitado hoy las ocho unidades ya instaladas en Monte, y ha avanzado que el resto se colocarán de forma progresiva en Cueto (10 en la calle Peregrino Zuyer), Nueva Montaña (6 en la calle Tomás y Valiente) y Peñacastillo (6 en Severo Ochoa).
Igual ha estado acompañada por el director territorial de Banco Santander en Cantabria y Asturias, Manuel Iturbe, la concejala de Barrios, Lorena Gutiérrez, así como por vecinos del barrio de Monte.
Según ha explicado la alcaldesa, la iniciativa se enmarca en un acuerdo entre el Consistorio y la entidad financiera, que pone a disposición de los ciudadanos nuevo mobiliario urbano al tiempo que contribuye a hacer de Santander una ciudad más sostenible.
Igual ha mostrado su agradecimiento al Santander por esta donación, así como por la colaboración de la entidad con el Ayuntamiento en numerosos proyectos de gran calado para el avance de la ciudad y la mejora del bienestar de los vecinos.
“Estas actuaciones demuestran la alianza que tiene el Banco Santander con su ciudad, y que se extiende a muchísimos ámbitos como el social, el cultural, el económico, la proyección exterior y, en este caso también, el medio ambiental”, ha subrayado Igual.
Por su parte, Manuel Iturbe ha explicado que “esta donación forma parte del compromiso que mantenemos con la ciudad de Santander y del objetivo de ser cada día un banco más responsable y reducir nuestro impacto en el medio ambiente, por lo que ver cómo los cántabros forman parte de este esfuerzo, supone para nosotros una gran satisfacción”.
Además, Iturbe ha agradecido también la colaboración de todos aquellos clientes que, reciclando sus tarjetas, han hecho posible este proyecto altruista de economía circular.
Del bolsillo a la ciudad
Según ha explicado, hace más de un año que Banco Santander puso a disposición de sus clientes la posibilidad de entregar sus tarjetas caducadas o deterioradas para someterlas a un proceso de reciclaje y transformación en mobiliario urbano.
El cliente deposita su tarjeta caducada en el cajero automático y unos días después recibe un mensaje que le confirma que ha sido reciclada. Las tarjetas se convierten en materia prima para fabricar este mobiliario, junto con redes marinas recuperadas del fondo del mar, dando una segunda vida al producto. En estos momentos, el Santander está donando los bancos fabricados a distintas ciudades españolas como Santander, Valencia o Málaga, cuyos ayuntamientos son los que deciden las ubicaciones más adecuadas para el mobiliario. 08/03/2024