La compañía ha utilizado 500 Mwh de biometano para producir 10 toneladas de hidrógeno renovable que se han utilizado para fabricar combustibles de baja huella de carbono, como gasolina, gasóleo y queroseno para aviación.
Repsol considera esta operación un "primer paso" para sustituir el gas natural convencional por biometano de origen sostenible, elaborado a partir de residuos urbanos, para la producción de hidrógeno renovable.
Con este procedimiento, la empresa busca descarbonizar sus procesos y productos. Esta primera prueba industrial realizada por Repsol servirá también de ejemplo para el desarrollo del sistema de garantías de origen para los gases renovables que se implementará en España y que el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico acaba de sacar a información pública como borrador de Real Decreto.
Repsol está transformando sus centros industriales en polos multienergéticos capaces de convertir residuos y otras materias primas de origen renovable en productos con baja, nula o incluso negativa huella de carbono. Desde 2018 ha llevado a cabo 230 iniciativas de economía circular y aspira a utilizar cuatro millones de toneladas de residuos como materia prima.
En octubre de 2020 anunció la construcción en Cartagena, de la primera planta de biocombustibles avanzados de España, que se pondrá en marcha en 2023, y tiene previsto construir una planta de biogás en el puerto de Bilbao. 06/10/2021