El secretario general de la Asociación de Constructores Europeos de Automóviles (ACEA), Erik Jonnaert, ha advertido de que una transición "apresurada" hacia una movilidad eléctrica podría tener "importantes" consecuencias socieconómicas y de empleo para el sector de la automoción, alertando de que se necesitan "muchos menos" trabajadores para producir automóviles eléctricos que de combustión interna.
Jonnaert destacó en una entrevista concedida a la agencia Europa Press que los miembros de la asociación necesitan transformar sus empresas a un ritmo "manejable" y que "proteja su viabilidad a largo plazo". En Europa trabajan 13,3 millones de personas en el sector de la automoción de manera directa e indirecta.
El secretario general destaca que “reestructurar nuestra fuerza laboral no puede suceder de la noche a la mañana, y no podemos escapar de la cruda realidad de que se necesitan muchos menos trabajadores para producir automóviles eléctricos que de combustión interna. Hay que gestionar este cambio de forma gradual”.
Así, defendió que el objetivo de emisiones que establece Bruselas deben ser económica y tecnológicamente "alcanzables", ya que, dado el "espacio limitado" de mejora de los motores diésel y gasolina, estos dependen "en gran medida" de las ventas de vehículos alternativos. 30/07/2018